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Sinue Hammed Fuentes Malo

Licenciado en Ciencias de la Comunicación egresado de la Universidad Autónoma de Chiapas, cuenta con dos títulos de maestría que corresponden uno a su formación profesionalizante y otro a su formación como investigador, Maestro en Ciencias en Recursos Naturales y Desarrollo Rural egresado de El Colegio de la Frontera Sur en la modalidad de Posgrado de calidad del CONACYT. Actualmente es doctorante de El Colegio Sonora, Con un proyecto de investigación vinculado al ferrocarril en el Soconusco. Está interesado en ayudar a la sociedad soconusquense, enfocado principalmente en temas académicos. La investigación que desarrolló Durante su estancia en ECOSUR Consiste en las memorias del proceso de mexicanización del pueblo Mam en el Soconusco, Con lo que también realizó una invitación a integrantes de pueblos originarios para que se sumaran al quehacer académico evidenciando así su presencia en la región.

 


Hacienda cafetalera en Chiapas. Foto archivo

Cuando Matías Romero se interesó en Soconusco dejó un registro muy importante de esta visita, bajo el nombre de: Cultivo del café en la costa meridional de Chiapas, texto que fue revisado y reeditado en varias ocasiones. Sin embargo como aclara él mismo, el texto original fue escrito en Tapachula en julio de 1874 y fue publicado por primera vez en el folletín “El correo del comercio” en mayo y junio de 1875. Ya en otras notas he explicado que el político y diplomático tenía motivos muy personales para ver un crecimiento de la región Soconusco, y aunque en esta publicación no menciona absolutamente nada personal, sí demuestra un interés muy marcado por nuestra región chiapaneca. Ante una comparación con la zona más cercana de Guatemala el político inicia explicando por qué el cultivo del café y el aprovechamiento de estas tierras traerían beneficios no sólo para Chiapas y la región sino también para el país. Desde su perspectiva, Guatemala había tenido un crecimiento exponencial desde el momento en el que optaron por la introducción y cultivo del café, por lo que se le veía crecer al país y también a los departamentos que se apropiaron de esta actividad comercial.

Con una postura meramente comercial y más técnica que académica, Romero (1893) explica que su publicación no es un tratado científico sobre las bondades del café y la mejor forma de producirlo, sin embargo externa que su intención radica en que, su escrito resulte de mucha utilidad para quienes decidan emprender en esta actividad comercial, a mayor y pequeña escala. En algunas de sus visitas realizadas a Guatemala observó que el valor de las tierras había crecido, principalmente, luego de la introducción del cultivo del café. En ese sentido explicó que la exportación anual del grano en el país vecino llegaba aproximadamente a los 200,000 quintales, mientras que la producción total de toda la república mexicana, sobre todo al escribir este texto, llegaba apenas a dos terceras partes de lo que se producía en aquel país. Ante esta situación, sugiere que aquellos terrenos guatemaltecos extienden su geografía llegando directamente a los terrenos nacionales y, en concreto, la extensión geográfica que corresponde a los pueblos del Soconusco. Aunque desde su perspectiva esta extensión territorial del lado mexicano parecía mejor regado y obviamente más provechoso para este grano.

Posiblemente por las limitantes de la época o por desconocimiento, el político se atreve a asegurar que la ciencia, para ese entonces, ha hecho muy poco respecto a favor del cultivo del café. Recordemos que esta es una de sus primeras publicaciones (concerniente a la región) por lo que para la siguiente (Romero, Importancia del cultivo del hule en el porvenir de la República, 1898), también en Soconusco, sí realiza un trabajo más amplio de revisión bibliográfica además de solicitar, por gracia de su puesto público, a universidades extranjeras información respecto a la producción de hule. Pero reconoce que el cultivo de este grano en Europa era muy superior y lo describe como “con una precisión casi matemática”. Y aunque hizo falta mayor revisión, con las técnicas europeas, reconoce que es muy importante conocer los componentes de la tierra que resulten favorables para una mejor producción, al igual que los abonos convenientes para el grano. Ante la producción de Veracruz, Sinaloa y Sonora, explica que Soconusco cuenta con la capacidad necesaria para producir al nivel de estos otros estados.

Aunque en esta publicación no todo es bondades sobre Soconusco, también explica las ventajas de producir café en la región, sobre todo para quienes estuvieran interesados y, respecto a las desventajas aclara que para él parecían fáciles de solucionar. Como era de esperarse durante estos años en algunos estados del país, se dieron prácticas como las del trabajo en las monterías de Chiapas y Tabasco (Benjamin T. , 1981), por lo que alguna de las ventajas que describe de la región Soconusco, como es el caso de mano de obra barata, resultaban muy comunes. Entre otras ventajas asegura que los terrenos eran muy baratos y había muchas facilidades para obtenerlos, al igual, la proximidad con el mar y la facilidad de costear el café con otros cultivos. Desarrolla cada una de estas ventajas pero queda claro que lo más importante para él era la tierra, desde la configuración de los terrenos hasta la altura con respecto al nivel del mar. Textualmente menciona “Mientras que en Colima y· en Córdoba necesita el cafeto del riego para crecer y prosperar, aquí crece y prospera sin esa ayuda” (Romero, 1893, pág. 12).

Cosecha del café en Chiapas. Foto archivo

Por el asunto antes mencionado, asegura en su escrito que los cultivos que se produzcan en la región Soconusco no necesitarían de riego constante y, al parecer la tierra suficientemente nutrida, el uso de abonos pudiera quedar en segundo plano o incluso no ser necesario. En los siguientes puntos, parece curioso cómo no deja de hacer menciones sutiles sobre más bondades de la tierra y, las facilidades que ofrece para otras actividades como la producción de ganado. En contraste con esto, las principales desventajas que Matías Romero observó en la región eran las que correspondían a: “falta de brazos en Soconusco y falta de demarcación de límites con Guatemala”. Para ese entonces se sabía que la región Soconusco solamente tenía unas cuantas manchas poblacionales, por esta razón, aunque resultaba fácil y barato traer mano de obra de otras regiones, conseguir trabajadores, a la larga también implicaba una considerable pérdida. El político era consciente que el sistema de enganche que resultaba muy común en la región, únicamente terminaba anclando a los trabajadores con aquel que hacía su papel de patrón. Por esta razón el dinero invertido en un trabajador lo terminaba considerando como un gasto enteramente muerto.

Y aunque lo anterior pudiera parecer una crítica o una queja directamente hecha por Romero, respecto a los derechos laborales de los trabajadores, no era más que una simple mención. Como alternativa sugiere que la gente “pobre” de Guatemala no veía como un problema trabajar en el estado y mucho menos en Soconusco. Mientras que la mano de obra, traída principalmente de altos de Chiapas, eran trabajadores que ante sus deudas terminarían escapándose, por lo que al ser reinstalados su deuda solamente crecería. “El único remedio para estos males es, á mi juicio, hacer venir á estas fértiles comarcas trabajadores de otros lugares de la República, en donde la gente pobre languidece en una vida miserable. El café da ocupación á las mujeres y los hijos de los trabajadores, y se siembra en climas templados, sanos y hasta agradables” (Romero, 1893, pág. 19).

Respecto los problemas concernientes a la demarcación de límites entre México y Guatemala, menciona que una de las tantas situaciones corresponden al interés en las tierras fértiles de Soconusco, lo que se termina traduciendo en inseguridad y peligro sobre todo para quien emprenda el trabajo del cultivo de café. Por esta razón enuncia al gobierno federal, mayor interés y preocupación en darles solución al problema de los límites. Esto principalmente porque los indígenas guatemaltecos se acercaban a las tierras, que se consideraban dentro del límite estatal, para poder sembrar maíz y otras semillas. La situación de los límites de hecho, resultó tan importante que aun en la actualidad es un asunto que se mantiene presente en la memoria colectiva del pueblo mam soconusquense y, sin dudarlo de la población guatemalteca que se vio vinculada a este asunto. Sigue siendo un tema de interés sobre todo para quienes se dedican a la investigación histórica.

Esta obra demuestra las primeras intenciones e intereses del político hacia Soconusco, sin olvidar que algún tiempo después, él mismo será quien se interese en defender el proyecto del Ferrocarril Panamericano y el trazo de la vía cruzando enteramente a los pueblos que conforman la región. Muchas de las situaciones no mencionadas y obviadas por el político encuentran explicación en publicaciones académicas que permiten comprender el asunto dejándolo más allá de simples y meras especulaciones subjetivas (Benjamin T. L., 1990; Ávila, 1997; Molina Pérez, 2006). La visita de Romero sin duda implicó para Soconusco su presencia y visibilidad ante la lente política nacional y empresarial. Las facilidades que el terreno ofrecía eran dignas de mención y aprovechamiento, sin embargo las situaciones que por estas tierras se darían, terminarían por extenderse fácilmente hasta 1990, la situación agraria en nuestra región siempre tuvo altas y bajas (Reyes Ramos, 1992). Siendo aún una región altamente productiva, la invitación es a quienes hacen política local, para que se preocupen más por hacer crecer a Soconusco.

Bibliografía

Ávila, A. (1997). Diplomacia e interés privado: Matías Romero, el Soconusco y el Southern Mexican Railroad, 1881-1883. Secuencia, 0(38), 051. doi:https://doi.org/10.18234/secuencia.v0i38.576.

Benjamin, T. (1981). El trabajo en las monterías de Chiapas y Tabasco, 1870-1946. Historia Mexicana, 30(4), 506-529. Recuperado de https://historiamexicana.colmex.mx/index.php/RHM/article/view/2629/2140.

Benjamin, T. L. (1990). El camino a Leviatán : Chiapas y el Estado mexicano, 1891-1947. México, D.F.: Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.

Molina Pérez, V. (2006). Por los rieles de Chiapas: construcción del ferrocarril panamericano. México: Sistema Chiapaneco de Radio y Televisión.

Reyes Ramos, M. E. (1992). El reparto de tierras y la política agraria en Chiapas 1914-1988. México: Universidad Nacional Autónoma de México, Centro de Investigaciones Humanísticas de Mesoamérica y del Estado de Chiapas.

Romero, M. (1893). Cultivo del café en la costa meridional de Chiapas (4 ed.). México: Secretaría de Fomento.

Romero, M. (1898). Importancia del cultivo del hule en el porvenir de la República (3 ed.). México: Secretaría de Fomento.

 

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